Raúl Hernández Moreno

Fue necesario que el gobierno de Nuevo Laredo le entrara al quite al tema de la nacionalización de vehículos americanos, para que la atención al público se sextuplicara. Esas son ganas de querer trabajar y atender a la gente de Nuevo Laredo.

La Oficina Fiscal del Estado abrió el 4 de agosto un módulo de atención del Registro Público Vehicular (REPUVE) y como se trata de un programa federal, en vez apoyarlo, lo obstaculizó  en un afán de querer dejar mal al Presidente López Obrador y fijó un tope diario de 32 nacionalizaciones.

En cambio, el gobierno municipal instaló módulos de nacionalización en los que esta semana se están atendiendo 192 vehículos diarios y para la próxima semana se proyecta duplicar esa cifra, para quedar en 384.

Es muy lamentable la actitud del gobierno del Estado al bloquear éste programa federal, creyendo que de esa manera afecta al gobierno federal, cuando en realidad los afectados son los ciudadanos.

Afortunadamente, la presidenta municipal Carmen Lilia Canturosas le entró al quite y consiguió que el gobierno federal autorizara la instalación de un módulo operado con recursos y personal municipal, lo que permite acelerar el número de atenciones diarias.

Si el gobierno estatal no se ocupa y preocupa por la gente de Nuevo Laredo,  tenemos en cambio una presidenta municipal comprometida a  apoyar a los ciudadanos.

Y todo esto va a mejorar a partir del 1 de octubre, cuando los tres niveles de gobierno estén alineados y sean del mismo partido.

El primer año de gobierno de Carmen Lilia  ha sido de avances y resultados. Ahí están como prueba las más de 110 mil vacunas contra el Covid, donadas por el gobierno estadounidense, los 420 millones de pesos en  obras de drenaje pluvial y sanitario, las más de 12 mil  becas escolares, el apoyo a la infraestructura educativa, las más de 20 mil consultas médicas y más de 9 mil veterinarias, el apoyo a la cultura y el deporte, los más de 1,300 millones en obra pública.

Si éste año, con la oposición del gobierno estatal, Nuevo Laredo salió adelante, con el respaldo de Américo Villarreal las cosas van a mejorar notablemente. Vamos a tener un gobernador al que sí le interesa el juicio de la  historia, como en su momento lo hizo su padre, Américo Villarreal Guerra y eso lo compromete a trabajar para rescatar a Tamaulipas del abandono de los últimos 6 años.

El Estado enfrenta rezagos en muchos temas. Uno de ellos es la educación universitaria. ¿Es mucho pedir, aspirar a tener una casa de estudios  similar a la Universidad Autónoma de Nuevo León?

Cuando existan universidades públicas de calidad, nuestros jóvenes no tendrán necesidad de  viajar a estados cercanos para educarse e incluso podrán  medir en una balanza si ingresan en una escuela pública de calidad o  su familia hace el esfuerzo de pagar 130 mil pesos el semestre en una  institución privada  que garantiza un alto nivel académico.

Hay mucho trabajo por delante, afortunadamente tanto a Américo como a Carmen Lilia les interesa trascender y hacer las cosas bien, en beneficio de Nuevo Laredo y Tamaulipas