La noticia que se comenta hoy en todos los medios de comunicación de México y en las redes sociales es la inesperada renuncia de Arturo Fernando Zaldívar Lelo de Larrea a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
RENUNCIA DE ARTURO ZALDÍVAR A LA CORTE
Por Armando Maya Castro
La noticia que se comenta hoy en todos los medios de comunicación de México y en las redes sociales es la inesperada renuncia de Arturo Fernando Zaldívar Lelo de Larrea a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
A través de una carta difundida en redes sociales, Zaldívar expresó al presidente Andrés Manuel López Obrador: “considero que mi ciclo en la Suprema Corte ha terminado y que las aportaciones que puedo realizar desde esta posición en la consolidación de un mejor país se han vuelto marginales”.
Añade en el documento en cuestión: "Estimo que es de mayor importancia sumarme a la consolidación de la transformación de México, desde los espacios que me brinden la oportunidad de tener incidencia en la construcción de un país más justo y más igualitario…”.
Para algunos no fue difícil sacar en claro cuáles son los espacios que, de acuerdo con su carta, le permitirán a Zaldívar incidir en la construcción del país al que dice aspirar, sobre todo al interpretar precipitadamente el encuentro que, posterior a su renuncia, tuviera éste con Claudia Sheinbaum, candidata de Morena a la presidencia de México.
En un país diestro para especular como el nuestro, las especulaciones de diversos políticos y analistas no se han hecho esperar. Algunos ven ya a Zaldívar trabajando en la campaña de Sheinbaum, y buscando al lado de ella algún cargo importante en la 4T en el próximo sexenio.
Lo primero es esperar a que el presidente de México acepte la renuncia del todavía ministro de la Corte, y que el Senado la apruebe. También es importante no perder de vista las restricciones constitucionales para las supuestas aspiraciones de Arturo Zaldívar.
Para algunos expertos en derecho constitucional, la renuncia en cuestión es inconstitucional. Uno de ellos es Francisco Burgoa, académico de la UNAM, quien escribió
al respecto en su cuenta de X, así como también de las posibles aspiraciones del todavía ministro de la Corte: “en términos del artículo 101 constitucional, p. 3. con relación al diverso 95-VI tendrían que pasar dos años contados a partir de que el Senado apruebe su renuncia para que pudiera ser Secretario de Estado, Fiscal General de la República o Gobernador”.
En breve veremos el desenlace de esta historia, así como también el uso político que la oposición y los detractores de AMLO le den al caso.
X: @armayacastro